dónde vio la luz tras su primera sonrisa a eso de finales de 1979.
Infancia feliz, mostró su inclinación artística consiguiendo de forma inconsciente el primer premio en 1986 “Dibujo y Expresividad Libre” de los colegios de primaria de Málaga, momento que no sale de su mente por su tierno agradecimiento a su estimado Maestro Carlos 🕊
Colores de Niñez
Un niño cariñoso, tímido creativo, no podía dibujar con el lápiz, requería muchos colores, descubrió la capacidad de unión y hermanamiento que aportan los trabajos plásticos en conjunto con sus compañeros de 4 de EGB obteniendo el primer premio de la ONCE de Catalunya 1.990 y Nestlé 1.991
Horizonte Disruptivo
Adolescente aplicado en su formación, tiempo libre, artes marciales, motor, hípica, y su pasión más pintura sobre diferentes superficies, murales, logotipos ya con 13 años que a día de hoy son referentes locales, coches, diseños, rotulaciones y un ilusionante abanico creativo.
Atención si continúas leyendo asumes el riesgo de entrar en tu Corazón.
Diciembre Trágico
Este horizonte brillante se rompe para siempre un 4 de Diciembre de 1.998, a las 8:55 horas más menos, David sufre un atropello accidental de un Camión de gran tonelaje el cual aplastó su pierna izquierda con las ruedas gemelas traseras y permaneció varios segundos sobre la misma.
Cómo dijo alguien en alguna ocasión «Nadie daba un duro por nosotros»
NEGLIGENCIA Hospital de Valme
El traumatólogo, le dio el alta (NEGLIGENCIA MÉDICA QUE PUDO COSTAR UNA VIDA) al no tener ningún hueso roto, y se fue a descansar, cuando a los pocos minutos ya en casa, sufre un Embolismo Graso, todo el sistema sanguíneo con grasa ósea, cerebro, pulmones, …, pocas esperanzas a los padres, hermanos, familiares y amigos que lo acompañan con la esperanza de que salga del coma profundo, durante 20 días de dolor extremo, en los cuales no había garantía por la vida de aquel cuerpo de 1,85 con 52 kg.
Nochebuena 1.998
David despierta del coma, así es, un día antes de Navidad, ante la sorpresa de médicos y cómo no, la de todos, David vivía, su estado era no importaba, lo importante era seguir aquí.
David jamás volvería a ser él mismo, con restos de grasa aún en su sistema sanguíneo, atrofiado el cerebro, la percepción, no sabía caminar, visión turbia, con prolongados estudios de sus ojos, …, era un cuerpo de 1,85 con la inocencia y el lenguaje que puede tener un niño de 3 o 4 años de edad.
¡Reto Superado!
SEGUNDA ETAPA
✨ Transformación 🎨
Si os interesa conocer cómo Gracias al Arte Comencé una nueva vida